jueves, 28 de junio de 2012

De la experimentación al placer con niños

La naturaleza del pedófilo o el origen de por qué se vuelve un gusto ver a niños y jóvenes desnudos tiene una razón directa y obvia: el maltrato crea al próximo maltratador. Sin embargo, existe un caso en particular en el que el victimario se forma por su propia cuenta. La curiosidad y posterior obsesión sobre este tema hizo de Manuel Sánchez un pedófilo que la justicia venezolana aún no ha puesto tras las rejas. No hay un modo único de que un posible pedófilo sea lo que es, sino la necesidad de experimentar este tipo de parafilia, en la que aún no se han desarrollado investigaciones.